El Plan. Retrato a la Obsesión

“Realmente el correo debería haber llegado la noche del 31 de Diciembre, pero ya que la red estaba saturada rebotó y decidí reenviarlo aunque sabía que mi plan no iba a funcionar” Esa fue la defensa que usó Marcos ante Marcela al ella enterarse de todo...

Tengo sueño, me voy a ir a dormir, no pero antes mejor reviso el correo, para variar nada en la bandeja de entrada, este estúpido filtro me envía todo a correo de no deseado... Revisemos no deseado, en una de esas me gané otras entradas al cine para ir a ver alguna Avant Premiere... ¿ Qué onda? Marcos le mandó algo a mi mamá... mmmm, pero no habían peleado, bueno...

- Mamá te llegó un correo de Marcos ...
- Que raro yo no espero nada de él, desde la última discusión en su casa no creo que sea lo mejor hablarnos, déjame verlo...
- Dice que lo veas tu sola y cuando lo termines que yo le envié un mail avisándole, yo me voy a dormir.

Semanas atrás un día domingo, lo recuerdo porque tenía que abrir el local a las tres de la tarde... Como es habitual en Verónica llamó a su hermana a su nueva casa y la escucho llorando, pidió que la fueran a buscar... Verónica llamó a su hermano y fueron a verla en seguida... Realmente no sé lo que pasó allá de manera completa, pero para resumir Verónica tuvo una discusión muy fuerte con Marcos, que creo que a los dos les dio vuelta por cabeza durante mucho tiempo... Sino no hubiera pasado lo que paso.

- Mauro!!! – Gritó Verónica
- ¿Qué pasa? – Conteste yo, saliendo de la cama...
- Mira lo que me escribió este desgraciado – me dijo mientras lloraba.

Leí la carta fue doloroso para mi, atacaba a mi madre, a mi hermana, a mi primo como nunca decidí mantener la calma para así no alterar a mi madre, que estaba imposible, lo único que quería era salir corriendo e ir a hablar con su hermana de lo que le había escrito ese infeliz, yo no la dejé salir y le dije a Romina que la vigilara que no hiciera nada y la tranquilizara, yo fui a hablar con Marcela, le conté lo sucedido y le dije que no hiciera nada hasta que viera la carta.

Al otro día, Lunes, Verónica ya más tranquila llamó a Marcela y le leyó la carta entera, ante esto Marcela decidió dejar a Marcos y le dijo a su hermana que el día Miércoles cuando él estuviera trabajando, vendría el camión de mudanzas y se iría de la casa, aunque realmente en la cabeza de ella no tenía ninguna intención de salir de ahí, por el amor que le tiene a Marcos.

Se acercaba el día Miércoles y Verónica decidió llamar a Marcela para preguntarle que iba a pasar con su salida de ese lugar y esta le contestó que no iba a poder ser, porque Marcos tuvo un problema con el vehículo en la tarde y que mañana lo iba a pedir libre, ya que no tendría auto. Marcela se salvó de salir, fue la excusa perfecta para no dejar a Marcos y le dijo a Verónica que el Viernes se iría a la playa.

Llegó el Día Viernes y Marcela se fue, claro dejó todo en la casa donde vive ella y Marcos para poder volver, estuvo todo el fin de semana allá, jamás le contó a sus padres lo que había pasado, Verónica se sentía cada vez más decepcionada de ella, sentía que prefería mucho más a Marcos que su propia familia, y créeme así lo fue.
Cuando Marcela llegó de la playa, la fueron a buscar el terminal Verónica, Romina y Rodrigo, su expareja y Padre de Martín, fueron a la antigua casa de sus padres y estuvieron allí durante un rato, esperando todos saber que iba a hacer Marcela, cuando de repente, mientras Marcela cambiaba de ropa a Benjamín, el hijo de Marcos, se estacionó un auto afuera de la casa con intenciones de entrar allí como si nada hubiera pasado, era Marcos, Verónica a verlo le prohibió a Marcela que lo dejará entrar, ya que ella tenía intención de que entrara, pero al ver la actitud de Verónica, no pensó en nada y solo tomo al bebé aun sin vestir y salió de la casa para subirse al auto donde estaba Marcos. Mi madre ante eso quedó helada, ya no sabía que hacer y vio que la elección y la forma de elegir que tuvo Marcela, fue lo que derramo el vaso y para Verónica en ese instante Marcela había muerto.

Marcos sonreía, decía para si mismo les gané a todos estos estúpidos y me quedé con Marcela, y no hice nada sino que ella me eligió a MI.

Esa noche cuando Rodrigo, vino a dejar a Verónica y Romina a su casa, se encontraron conmigo y me contaron lo sucedido, yo me enojé demasiado, o sea más bien me decepcioné, sentí que Marcela fue demasiado inconsecuente y que su decisión fue muy de niña y no pensó en las secuelas que traería tanto para ella, como para sus dos hijos, pensó solo en ella y en el instante.

Pasaron unos días, y Marcela estaba aquí en mi casa, con mi Verónica, Rodrigo y Romina como si nada, yo quedé bastante confundido y realmente no sabía como reaccionar así que decidí actuar como siempre soy, pasaron las horas y Marcela se fue y cuando por fin lo hizo pude preguntar que onda, que paso mientras yo no estuve, ante eso Verónica me dice:

“Conversamos con Marcela y quedó todo claro, nos dijimos todo lo que nos teníamos que decir y le deje bien el claro que ella y sus hijos son bienvenidas, pero Marcos no y que sueñe que yo iré a meterme a su casa”

Aunque lo dijo con rabia, según mi punto de vista, creo que no podía ocultar esa satisfacción de poder tener a su hermana nuevamente cerca y perdonarla por lo que hizo, lo que para ella esta bien.

Pero yo me preguntó, no será que Marcela consiguió lo que quería, o sea bajarle el perfil al problema y quedar bien con los dos lados de una u otra manera o quizás, como siempre lo ha hecho, hacer lo que ha querido sin que nadie le reproche nada...